Sábado 9 de mayo de 2020.
Aunque el Día del Madre lo celebran por costumbre los domingos, fui a ver a mi mamá hoy y le llevé un calefactor oleo eléctrico de regalo. Creo que no le tincó mucho, ojalá se anime y lo use pues algo ayuda a temperar y así no se preocupa de tener que estar haciendo fuego.
Mi mamá me contó que había fallecido un vecino. Un cabro joven que participaba de una pandilla que continuamente se quedaban trasnochando y metiendo bulla hasta la madrugada. Malos cabro no son pero es molesto el ruido. Teníamos la duda de la causa de la muerte y que no esté implicado el COVID-19. Cuando mi mamá salió a comprar a la panadería se enteró de la causa, el cabro se inyectó insulina y se fue cortado. Seguramente curao, agarró la insulina de alguien con diabetes y se la inyectó por que lo halló divertido. No se cual es la consecuencia de inyectarse insulina si no tiene diabetes, pero de seguro le dio un desequilibrio. Sólo entendí por lo que dice en Internet que produce un coma.
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